Cognac Raymond Ragnaud 2002

Historia de la bodega:

La historia de la bodega comenzó en 1860, cuando la familia de Raymond Ragnaud se enamoró de una pequeña viña en Grande Champagne, conocida por sus excepcionales aguardientes. En 1920, Paul Ragnaud se hizo cargo de la bodega en el Château d'Ambleville, y luego transmitió la propiedad a su hijo Raymond en 1941. Raymond decidió entonces comercializar los preciosos aguardientes heredados. En 1963, con la ayuda de sus hijos Françoise y Jean-Marie, la esposa de Raymond contribuyó a dar forma al futuro de la bodega, que ahora se extiende por 47 hectáreas distribuidas en tres viñedos distintos - Ambleville, Criteuil y Lignières-Sonneville - todos ubicados en las laderas de la Grande Champagne, conocida por sus aguardientes de incomparable finura. Durante tres décadas, Françoise Ragnaud-Bricq ha continuado la tradición supervisando la cosecha con atención meticulosa y una experiencia inigualable.

Presentación del coupage:

La casa Raymond Ragnaud ofrece una colección excepcional de añadas que van desde 1990 hasta 2006. Para preservar su autenticidad, no se agrega caramelo, madera ni azúcar. Apenas se realiza una ligera reducción con agua destilada, sin filtración a presión ni enfriamiento. Como todos los cognacs de la casa Raymond Ragnaud, esta añada 2002 proviene de uvas cultivadas exclusivamente en Grande Champagne. Es una mezcla suntuosa de aguardientes de la cosecha 2002. La botella adopta un formato clásico y tradicional, mientras que una etiqueta detallada sobre el producto atraerá a los conocedores. Esta añada 2002 tiene un hermoso color ámbar. En nariz, revela aromas de nueces, almendras, cereales y matices picantes. Las notas afrutadas de manzana cocida, pera y albaricoques secos se entrelazan delicadamente, con un ligero toque de chocolate y café. En boca, es rico y generoso, con sabores sabrosos de pastel de frutas confitadas y frutos secos. Un sutil toque de cáscara de naranja y mandarina aporta vivacidad y frescura, complementado con notas de nueces, almendras y brioche para un equilibrio complejo. El final seco y largo, dominado por cítricos, vainilla y especias, hace de este cognac un digestivo enérgico y elegante.